TRABAJO COMO UN NIÑO, DESCONOCIDO Y SIN REGLAS.
informe
SELİN Ş. MANSO
¿Una canción que has estado escuchando repetidamente últimamente?
Surfear por Mac Miller
Si tuvieras un superpoder, ¿cuál sería?
Para revivir flores marchitas.
¿Un personaje ficticio en el que te gustaría interpretar?
Me gustaría ser Alicia en Alicia en el país de las maravillas. Tiene la libertad de divagar. Caer al fondo nunca ha sido tan divertido.
¿Cuál es una pregunta a la que siempre obtendrás una respuesta honesta?
"¿Estás feliz?" Porque moldearía mi comportamiento según la respuesta que recibiría y me acercaría de forma más ingenua a la persona que realmente era infeliz. Compartiría la felicidad de aquellos que ya son felices.
Si un artista te hiciera una fiesta, ¿quién sería ?
En realidad hay dos artistas, pero le tengo miedo a uno de ellos. Salvador Dalí y Jean-Michel Basquiat. Probablemente no duraría ni cinco minutos en la fiesta de Dalí, pero aun así sería una gran fiesta. Ojalá pudiera hablar con Jean-Michel Basquiat aunque fuera cinco minutos. Sería delicioso poder hablar con él sobre mi trabajo. Realmente me impresiona que haya venido de una situación muy mala y que sus obras en capas sigan formándose incluso después de su muerte.
¿Cómo te llevas con Yeni? ¿Cómo y por qué te desafías a ti mismo?
Lo que más me interesan son los artistas del período primitivo. Me interesa mucho lo que llaman específico de la infancia, no me gusta quedarme dentro de un límite determinado. Ya tengo una profesión bastante formal, soy abogado. Vivo el resto de mi vida de manera muy formal. Me encanta que cuando me siento a hacer arte, se convierte en un espacio donde puedo crear mis propias reglas, como si todos los límites desaparecieran y no quedaran reglas, la verdad para mí es la mente de zigz. Trabajo más como un niño, desordenado y sin reglas. Creo que estoy sólo a la mitad de este viaje. Existe un concepto que Don Miguel Ruiz llama sueño comunitario en su libro Los Cuatro Acuerdos. Desde ese día no he podido pensar en nada más. El objetivo de despertar del sueño de la sociedad es como volver a ser un niño. Por ejemplo, no has visto el sol en todo el día y te quedas sin cigarrillos así que sales, mientras vas al supermercado ves a todos siguiendo con sus vidas, tal vez no tengas resaca, Te pones las gafas, es como si hubieras entrado en un mundo diferente, de hecho, eso es todo, es un sueño de la sociedad, lo que se vive en casa es lo que debería suceder. Es posible para mí hacer una transición rápida a este estado y regresar a mi estado de vigilia desde el sueño con la meditación. También soy un poco hedonista. Cuando veo ese momento, aunque sea mi boda, no asistiré. He dibujado ese camino para mí, en el momento en que quiero dibujarlo, en el momento en que estoy en ese momento, tengo que dibujarlo.
¿Cómo es tu rutina de estudio?
Trabajo en desorden. No me siento a decidir qué dibujar. Empiezo dibujando lo que me apetece en ese momento, y cuando lo termino, entiendo lo que estoy dibujando. Cosas que parecen muy desconectadas pueden de repente conectarse.
¿Cómo estás con los cuadros terminados?
Tengo mucho trabajo que no puedo mostrar después de terminarlo. Francamente, siento mucho la presión social. Por eso no comparto todos mis trabajos, pero después de compartirlos, no miro hacia atrás a mis trabajos antiguos. No pienso en ello hasta que alguien pregunta algo. Sucede y termina. También tengo algunos negocios que destruí. A veces también necesito destruir.
¿Las fotos que no has compartido tienen algo en común?
Sí lo hay. Más trabajo que implique desnudez o malos hábitos. Tengo miedo de que sólo porque pinté este cuadro me definan de esa manera. Del mismo modo que podrían pensar que eres esquizofrénico porque dibujas a un esquizofrénico . Aunque dibujo lo que siento sin límite, siento presión social por el pequeño lugar donde vivo y mi profesión, y no prefiero compartir estas pinturas.
¿Qué sería diferente para ti si estuvieras en un país donde nadie te conociera y no sintieras la presión de la sociedad?
Podría liberar algunas de mis inhibiciones sobre mi producción. No ser conocido por nadie tendría un efecto liberador en mí, lo que me haría trabajar mejor.
¿Cómo es tu relación con el público?
Podemos decir que mis pinturas son autobiográficas. A veces pueden describir una situación de unos pocos segundos, a veces un período de 5 años. Por ejemplo, mi trabajo llamado Pubertad en shopi go ART incluye mi CV completo hasta el momento. Aunque no es un evento concreto, intento transmitir una emoción. Incluso si evoco una determinada emoción, ya siento que he logrado mi objetivo. Me encanta hablar de mí. En realidad, lo considero como un escaparate. Cuando puedo tocar un cierto punto en la vida de las personas mostrando que soy esto pero también aquello, eso es suficiente para mí. No tengo ningún deseo de llegar a grandes audiencias. Al principio, hacía un trabajo más realista, pensando que si hacía esto, tenía que mostrarle a la gente lo bueno que era. Si estuviera haciendo una ardilla, la dirían hermosa cuando les diera cada detalle, pero un movimiento que hiciera a través de la imaginación o de cualquier otra manera podría parecer el dibujo de un niño y no podía encontrar apoyo para ello. Ahora lo hago de una manera que sólo yo puedo entender. Ahora, a veces se los muestro a las personas que pinto y los veo luchar y tratar de descubrir quién es quién. Lo estoy disfrutando más ahora.
¿Sueños diurnos o sueños nocturnos?
Soy un gran fanático de la hora azul. Justo cuando se pone el sol. Siento que todas las inspiraciones funcionan para los artistas en esas horas. Hay una terraza donde vivo, donde paso la mayor parte del tiempo desde el atardecer hasta el amanecer. Puedo decir que nunca despierto de ese sueño, siempre está a mi alcance. Ya llevo un diario de sueños.
¿También utilizas tu diario de sueños cuando trabajas en tus pinturas? Te firmas como Rosy, ¿Rosy también viene de los sueños?
Sí, el seudónimo Rosy fue algo que para mí surgió de los sueños. Firmo mis cuadros con la letra R. Un día, después de escribir un sueño mío, dije ¿por qué no lo dibujo? En mi sueño iba al mar con mi bicicleta. Monté mi bicicleta desde la playa hasta el mar y seguí pedaleando. Anduve en bicicleta sin parar, en el fondo del mar. Pinté este sueño más tarde. Cuando entré en Internet para ver interpretaciones de sueños, encontré una cita de un poeta. El poeta también dijo que lo arrojó al mar. Los estereotipos esterilizan a las personas, entonces las tiran al mar... O sea, decía, hago tanto el lado regular como el lado irregular. La profundidad de lo que encontré al mirar el sueño que tuve, su imagen y luego simplemente una frase me impresionó mucho. Vi cuánto lo disfruté. Después de muchos años, comencé a expresarme de nuevo a través del arte de esta manera.
¿Cuándo empezó tu primera conexión con la pintura? ¿Cómo te tomaste un descanso?
Cuando estábamos en el jardín de infancia, nos pidieron que hiciéramos un dibujo con el tema de las fiestas. Mientras todos los demás dibujaban dulces y chocolates, yo dibujé un cementerio y se convirtió en algo importante. Llamaron a mi familia. Solíamos visitar a mi abuela y a mi abuelo todas las vacaciones. A esa edad vi el impacto que podía tener algo que dibujaba con emociones puras. Incluso fui a un curso de pintura en esa época. Mi familia me permitió seguir mis sueños cuando tenía esa edad. Sin embargo, obtuve una puntuación alta en el examen universitario, lo que describí como de mala suerte. En lugar de hacer el trabajo que él quería, que es el problema de todos los jóvenes que viven en Turquía, me ordenaron que hiciera un trabajo que me ayudaría a recuperarme en poco tiempo y estudié derecho. Ni siquiera le había dicho a mi familia que quería dedicarme al arte. Estaba un poco arrestado en ese momento. No podía decirle a la gente mis deseos, tenía miedo de cansar y molestar a las personas que amaba. Empecé a trabajar como abogado. Todos los días iba a algún lugar al que no quería y me despertaba en un lugar con el que no estaba contento. Siempre quise volver al pasado, a mi infancia, a los años en los que podía crear lo que quería sin estar realmente sujeto a ninguna regla. Estaba atrapada entre los deseos de mis seres queridos y mis propios deseos. La terapia, el yoga y el arte me ayudaron a respirar de nuevo. Han pasado 15 años, sigo dibujando. La gente necesita saber que hay una salida y que no están solas. No es nada de qué avergonzarse. Al principio dibujaba sobre lienzo, pero como todavía trabajaba como abogado, tenía dificultades para crear espacios. Necesitaba algo portátil para dibujar. Así entré al campo digital. Además de mis obligaciones diarias, podía hacer lo que quisiera, cuando quisiera. Ahora yo era abogada de día y Rosy de noche.
¿En qué te diferencias de Rosy?
Rosy es en realidad mi lado infantil. Selin es mi lado que es abogado, asiste a audiencias judiciales y tiene que vivir una vida estable. Rosy, por otro lado, es alguien que hace sus propios deseos y no le importa. Ambos se alimentan mutuamente. Sé que no puedes tener uno sin el otro. En el pasado, siempre quise ser alguien a quien sólo le interesara el arte. Sentí que me obligaron a hacer el otro. Ahora sé que si no hay la abogada Selin, no habrá Rosy. Hace unos meses tuve otro período de depresión, no quería ir a trabajar. Quería tomarme un descanso de unos meses y simplemente pintar. Pero Rosy también estaba molesta y yo realmente no podía hacer nada. La existencia de Selin es lo que alimenta a Rosy. La presencia de Rosy también mantiene viva a Selin. No me vuelvo loco con la vida de oficina porque es Rosy.
¿Cuál es un desafío que crees que todo artista debería experimentar?
Creo que todo el mundo debe haber alcanzado su punto más bajo personal como artista antes de cumplir 25 años. Por supuesto, no encuentro que tocar fondo sea útil en general, pero creo que una vez que experimenta una experiencia cercana a la muerte, necesita ver el punto en el que no puede respirar y aprender a salir de allí.
Foto de : Duygu Yasa
Vídeo: Duygu Yasa
Entrevista: Öyküm Pala
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